Víctor Rodríguez: una vida profesional llena de proyectos de altura

Víctor Rodríguez Izquierdo es un joven grancanario que estudió la carrera de Caminos, Canales y Puertos en la Universidad de Cantabria y después la de Arquitectura que comenzó en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y terminó en Madrid, concretamente en la Universidad Alfonso X. Actualmente reside en Alemania y se encuentra dando los primeros pasos como emprendedor creando una empresa con otros compañeros especializada en estructuras, lo que le ha llevado a vivir a caballo entre Alemania y Gran Canaria. Hoy nos cuenta su amplia y extensa trayectoria profesional.

¿Qué te llevó a estudiar Ingeniería y más tarde tu segunda carrera  Arquitectura?

Estudié Ingeniería de Caminos en la Escuela de Santander y fué bastante exigente pero, el último año lo hice en la Universidad de Bristol en Inglaterra, la vida allí me dió las fuerzas necesarias para empezar Arquitectura. Las considero dos carreras muy complementarias, pero ha sido un gran sacrificio.

¿Y a emigrar a Madrid en un primer momento y después a Alemania?

Al terminar Caminos empecé Arquitectura elegí la escuela de Las Palmas para no seguir suponiendo una gran carga económica para mi familia. A los dos años ya me faltaban pocas asignaturas, así que decidí emigrar a Madrid para ponerme a trabajar en una multinacional, Ove Arup,  para la que ya había trabajado en Cardiff durante un verano,así que decidí trasladar mi expediente académico a una universidad privada para poder compatibilizarlo.

Tras tres años en Madrid y con las asignaturas de Arquitectura acabadas, decidí dar el salto a Alemania.  Yo tenía la idea clara de vivir en Canarias, pero quería aprender lo más posible antes de volver. La idea era ir a ir a un mercado fuerte en la construcción y en el que aprendiera un nuevo idioma que me fuese útil al volver…

¿Personalmente, cómo lidiaste con la aventura de vivir sólo en un lugar lejano al hogar?

Vivir en Madrid, después de haber vivido en Santander, Bristol y Cardiff, fué un placer. Stuttgart, que es dónde vivo en Alemania, sí que fue bastante más duro, sobre todo porque, aunque me fui con trabajo ya desde España, no hablaba ni una palabra de alemán. El salto cultural es grande y en cuanto al clima, lo que más difícil se me hizo fue acostumbrarme a la falta de luz en el invierno.

Sobre ti, hemos podido leer que has trabajado con diferentes empresas de renombre en el sector de la Arquitectura e Ingeniería civil, ¿qué es lo que has aprendido de cada una de ellas?

Bueno. ya durante los estudios en verano hice muchas prácticas en distintas empresas. En la isla estuve algunos periodos en la Autoridad Portuaria, me encantó trabajar allí. También hice prácticas con Dragados en la construcción del viaducto que une Escaleritas y la Feria. Pero fueron unas prácticas en País de Gales para la multinacional británica Ove Arup las que más me marcaron. Se trataba del proyecto para la construcción de tres rascacielos en Panamá, el central iba a ser el edificio más alto de América Central si no recuerdo mal 480 metros debía tener… el grupo inversor quebró durante la construcción y no se ha finalizado.

Con ellos trabajé en las oficinas de Madrid durante más de dos años. En Alemania he trabajado para dos consultoras especializadas también en estructuras. Teuffel Engineeering fue la primera, es una empresa relativamente pequeña en la que se me dio la posibilidad de liderar proyectos y equipos de trabajo desde el principio, mi idea crecer profesionalmente muy rápido.

Actualmente,¿en qué empresas u organizaciones realizas tu actividad profesional?

Actualmente trabajo para la consultora alemana de ámbito internacional, Mayr Ludescher Partner, es de tamaño medio y con un nivel técnico excepcional. Llevo más de tres años con ellos aunque hace unos meses decidí reducir mi responsabilidad liderando proyectos, para poder empezar a vivir a caballo entre Stuttgart y Gran Canaria, paso unas dos semanas al mes en Gran Canaria y otras dos en Alemania.

Además de mi vida profesional también tengo una vida académica continua, realizo un doctorado entre la Universidad de Sevilla y la Universidad de Stuttgart y he estado los dos últimos años dando clases en la Universidad de Stuttgart para tres centros distintos, relacionados con la construcción, las estructuras y la robótica. Actualmente, como sólo paso parte del mes en Alemania, sólo sigo ligado a uno de estos centros.

De tu carrera profesional, ¿qué proyectos destacarías por ser los más complejos pero, a la vez, más satisfactorios profesionalmente? ¿Dónde radicaba la dificultad de dichos proyectos? ¿Qué solución idearon para enfrentarse a ello?

Quizás por ser el primer proyecto en el que tuve un papel interesante, destacaría antes que ningún otro Metropol Parasol (cconocido cómo “Las Setas”) en la Plaza de La Encarnación en Sevilla. Es la estructura de madera microlaminada más grande del mundo, ganó el concurso arquitectónico sin tener una solución técnica, no sabíamos ni el material en el que se iba a construir. Especialmente las uniones fueron un proceso de investigación muy complejo.

Me gustaría destacar también algunos rascacielos, he tenido la suerte de trabajar en algunos de los mayores edificios del mundo. El más complejo sin duda ha sido la Royal Mecca Clock Tower en la ciudad santa de La Meca en Arabia Saudita. Consistió en la ampliación de una torre en construcción de unos 380 metros para convertirla en el segundo edificio más alto del mundo (actualmente el tercero) con 601 metros de altura. Para resolverlo, se coloca una estructura metálica portante asimilable a la Torre Eifel encima de la estructura de hormigón armado en ejecución. Este proyecto es el núcleo en el que se está basando mi tesis doctoral.

También mencionar, por lo espectacular del edificio, que he colaborado en la Kingdom Tower, el que va a ser el edificio más alto del mundo (ya veremos por cuanto tiempo) con alrededor de 1.000 metros de altura. Está situada en Jeddah, Arabia Saudita, actualmente en construcción, ya supera los 350 metros.

Realmente los proyectos que mayores satisfacciones me han dado no son tan espectaculares y conocidos como los que he mencionado hasta ahora. Proyectos en los que he tenido mucha responsabilidad, en los que los problemas eran quizás igualmente complejos pero los medios disponibles no eran ni parecidos, por ejemplo actualmente estamos terminando un centro para la danza en Stuttgart (Academia John Cranko)  que es quizás el proyecto más complejo en el que he participado. Y si quiero hablar de satisfacción personal, sin duda, he de nombrar una pasarela que pronto construiremos en Alemania, es muy especial para mí porque hace un par de años gané por primera vez un concurso arquitectónico con una idea propia.

Y por último, por la innovación y la complejidad que supone para la construcción, me gustaría destacar los proyectos que realiza uno de los centros de la Universidad de Stuttgart en el que estuve ligado como docente hasta hace muy poco. El centro es el ICD, Instituto de Diseño Computacional y Construcción,  en él se mezclan tres factores principalmente, el diseño computacional (codificación del diseño y la fabricación digital), la robótica y la biomímesis. Es un centro puntero a nivel mundial, es espectacular trabajar con ellos.

Hace poco más de un año comenzaste tu aventura como emprendedor con la creación de una empresa en el sector de la construcción Structures Laboratory S.L., ¿cuál fue la inspiración tras esta iniciativa? ¿podrías describirnos cómo fue el proceso desde que se te ocurrió la idea hasta que, finalmente, se hizo realidad? 

Con el firme propósito de volver a las islas, hace cerca de dos años surge la idea de crear una empresa para aprovechar estos ya más de 6 años en Alemania y la gran cantidad de mano de obra cualificada que hay en en las islas con pocas oportunidades. Tengo dos socios arquitectos en Las Palmas que son además grandes amigos y así hace un año cuando conseguimos confirmar un encargo de cierta envergadura creamos S.LAB.

En cuanto a la actividad de esta empresa, ¿cuál es su tipo de clientes y en qué países trabajan? ¿cuáles son sus objetivos de crecimiento a corto y largo plazo?

Actualmente estamos en periodo de apertura de mercado, fidelizando clientes, el proceso de formación para poder trabajar con estándares alemanes es exigente y requiere mucha práctica. En estos momentos ya estamos con nuestro 5º proyecto, todos ellos en Alemania. Estamos creciendo muy lentamente para poder asegurar la calidad del trabajo, no tenemos ninguna prisa.

En cuanto a mis perspectivas personales, me encantaría compatibilizar esta actividad empresarial con el desempeño de la actividad profesional en algún estudio o alguna de las empresas consultoras o constructoras ya referentes en las islas. Desde luego otra de mis pasiones y sueños es el poder dar clases e investigar para las universidades canarias, trabajo duro para ello, aunque es muy exigente el compaginar la vida académica y la profesional y poder ser competitivo en ambos mundos.