Enrique Fernández: construyendo la inteligencia artificial del futuro
Enrique Fernández estudió Ingeniería en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y como él mismo nos dice: ” Mi interés por estudiar una Ingeniería nace de mi pasión por crear. Podía haber estudiado cualquier Ingeniería, pero decidí hacer Ingeniería Informática porque es la rama que permite crear con menos recursos y de manera independiente. Prácticamente basta un ordenador y un editor para programar. Sin embargo, al final de la carrera empezó a atraerme la posibilidad de que mis “creaciones” interactuaran con el mundo, ejecutándose en robots móviles. Eso fue lo que me llevó a especializarme en Robótica, estudiando el postgrado en Sistemas Inteligentes y Aplicaciones Numéricas en Ingeniería”
Tienes una dilatada experiencia en el ámbito de la robótica y la inteligencia artificial, ¿cuál ha sido el desarrollo profesional que has seguido en ese campo? ¿te atraía desde un principio?
La Inteligencia Artificial, y en especial la Robótica móvil, me empezó a atraer al final de la carrera, durante mi Proyecto Fin de Carrera, pero fundamentalmente durante el desarrollo del Máster en Sistemas Inteligentes y Aplicaciones Numéricas en Ingeniería. Ahí fue cuando por primera vez un robot móvil ejecutó código desarrollado por mi. Desde entonces he trabajado con diferentes tipos de vehículos autónomos móviles: submarinos, humanoides (bípedos) y actualmente plataformas móviles con ruedas. Durante este tiempo me he especializado en algoritmos de percepción que permiten a estos vehículos crear un representación del entorno para localizarse y desplazarse de manera eficiente a través del espacio libre navegable.
Una vez terminados tus estudios y tras trabajar una temporada en la isla, decides dar el salto al exterior, primero a Barcelona y en la actualidad en Canadá, ¿cuáles fueron tus motivaciones iniciales?.
Aunque también ha habido motivos familiares, en ambos casos la principal motivación ha sido siempre aprender de manera práctica nuevas técnicas, algoritmos y metodologías. Igualmente, también me ha movido el interés por colaborar a resolver grandes desafíos para acercar la robótica móvil a un nivel de madurez suficiente que permita su uso interactuando de manera eficiente y segura entre personas, ya sea para uso doméstico, investigación o industria.
Cuéntanos cómo surgió la oportunidad de trabajar en la empresa Clearpath Robotics en Canadá y a qué se dedica.
Fui yo quien contactó con Clearpath Robotics y tras pasar las entrevistas técnicas me uní a ellos cuando comenzaban a orientar su negocio al sector industrial. Desde entonces la empresa ha crecido exponencialmente, desde 50 a más de 200 empleados en a penas 2 años. Del mismo modo, la empresa ahora consta de dos divisiones: Clearpath Robotics y OTTO Motors. La primera sigue desarrollando plataformas móviles para investigación, mientras que la segunda está centrada en el sector de ‘Material Handling’ en la Industria 4.0, con dos plataformas móviles: OTTO 1500 y OTTO 100. Estos robots móviles pueden transportar 1500 y 100kg respectivamente entre diferentes puntos de una fábrica, permitiendo reducir costes, aumentar la eficiencia y mejorar la calidad de los procesos. De hecho, ya disponemos de numerosos robots trabajando 24/7 en varias fábricas de clientes como John Deere o General Electric, entre muchos otros.
Háblanos de cómo es tu día a día y y en qué proyectos trabajas
Clearpath es un startup que ofrece muchas facilidades y flexibilidad a sus empleados, desde trabajar remotamente si lo necesitamos excepcionalmente, hasta realizar múltiples eventos sociales entre compañeros. Ahora somos un grupo muy grande y con responsabilidades bien definidas. Por este motivo suelo trabajar fundamentalmente desarrollando software para mejorar los algoritmos de percepción de nuestros robots. Esto incluye algoritmos de SLAM (Simultaneous Localization And Mapping) y localización en entornos bastante complejos y dinámicos. Los proyectos en que trabajo son confidenciales, pero se centran en mejorar las técnicas que ya funcionan en nuestros robots para hacerlas lo más robustas posibles, reduciendo así al mínimo las intervenciones necesarias por parte del cliente. En un sector tan competitivo ya no basta tener un producto que funcione, tenemos que ofrecer el mejor. Por ello, participo en el desarrollo de técnicas de IA (Inteligencia Artificial) y CV (Computer Vision) recientes, que son estado del arte.
¿Qué te está aportando esta experiencia tanto a nivel profesional como personal?
A nivel profesional he aprendido y visto como el trabajo en equipo, una buena coordinación y dedicación, a veces con importantes picos de trabajo, al final puede generar grandes resultados. Igualmente he podido desarrollar y probar muchos algoritmos de robótica, aprendiendo de manera práctica cuáles funcionan mejor en entornos reales.
En el plano personal, he hecho muy buenas amistades con compañeros y gente del lugar, de muy diversas nacionalidades. Canadá es un país muy diferente de España y he aprovechado para visitar y descubrir muchos sitios, especialmente sus parques naturales. El pasado verano pude ver ciervos y osos negros desde muy cerca, aunque lo habitual es ver muchas ardillas en el jardín.
¿Cómo se puede potenciar desde las instituciones públicas el desarrollo de profesionales en las ramas de ingeniería y científicas?
Creo que la difusión de resultados y potenciales opciones de trabajo son los puntos principales, a través de la colaboración con empresas y otras instituciones. Esto facilitaría el acceso de profesionales a estas instituciones o empresas, ya sea formando parte de su plantilla o colaborando remotamente. En mi opinión esto mejoraría la calidad de nuestra oferta académica (que ya es muy buena), y el atractivo para que más estudiantes se animen a ser ingenieros.
¿Dónde ves tu futuro laboral? ¿Volverías a Canarias?
A corto plazo mi intención es seguir acometiendo grandes desafíos en Clearpath. A medio o largo plazo es posible que vuelva a Europa. Volvería a Canarias si pudiera seguir trabajando en robótica móvil en unas condiciones similares a las que tengo ahora aquí, en términos de recursos. En Canarias la calidad de vida es muy buena, así que sería genial poder trabajar desde Canarias en robótica, con desafíos tan ambiciosos como los que tenemos aquí: realizar la siguiente revolución industrial.