Clara Sosa: “Hay mil oportunidades de desarrollo en Canarias. Consiste en lanzarse a desarrollar proyectos propios e innovadores”

Clara Sosa se doctoró en Turismo integral, Interculturalidad y Desarrollo sostenible por la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Está vinculada profesionalmente a Grupo Innovaris, que es una empresa de servicios altamente especializada, con 12 años de trayectoria tanto en el ámbito de la Administración y Gestión Pública como en el sector privado. Ofrece una amplia experiencia en proyectos de desarrollo en diferentes sectores económicos, así como en la gestión de programas y proyectos financiados con fondos europeos o de desarrollo local. La empresa ha conseguido un posicionamiento excelente en estas actividades, principalmente en la región canaria, aunque ha operado en diferentes regiones españolas y latinoaméricanas. Actualmente continúa en proceso de internacionalización principalmente enfocado en el mercado latinoaméricano. 

¿Podrías definirnos brevemente las principales líneas de acción del Grupo Innovaris?

Las principales líneas de acción del grupo son:

-Proyectos: Servicios Integrales para el Sector Privado; Asistencia Técnica en Proyectos de Financiación Estatal, Europea e Internacional; Servicios de Prospección y Captación de Licitaciones Internacionales; Asesoramiento y elaboración de Planes de Igualdad, formación y asistencia técnica; Gestión Integral de proyectos Públicos y Privados.

-Sistemas de Gestión: Gestión de la Calidad ISO 9001:2015; Gestión del Medio Ambiente 14001:2015; Seguridad laboral OSHAS 18001

-Formación: Proyectos y Planes de Formación a Medida; Formación Bonificada-Fundación Tripartita; Formación On-Line a través de una plataforma propia; Formación para la Administración Pública.

¿Cómo surgió la oportunidad de trabajar en esta empresa y más concretamente trasladarte a Chile?

Mi vinculación profesional con el Grupo Innovaris comenzó en el año 2013 coordinando dos proyectos de desarrollo de productos turísticos, concretamente para los municipios de Artenara y Santa Brígida. En el caso concreto de Chile, la oportunidad surgió tras la convocatoria que el Gobierno chileno, a través de la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO), crea con los Programas Estratégicos de Especialización Inteligente, que se orientan a proveer los bienes públicos necesarios para eliminar los obstáculos al crecimiento asociados al bajo nivel de desarrollo, diversificación y sofisticación de algunas industrias, y a invertir en el capital social y en una institucionalidad que garantice visión de largo plazo.

En enero del año 2015 se publica una licitación para diseñar un programa estratégico para la región de Arica y Parinacota, al norte de Chile, asociado al desarrollo del turismo deportivo vinculado al patrimonio natural y cultural en el borde costero de esa región.

Innovaris me ofrece entonces la oportunidad de ser Jefa de proyectos y por supuesto acepté. Trabajamos duramente y con un equipo multidisciplinar con especialistas españoles y chilenos para armar una propuesta global y transversal para la región. Tanto esfuerzo e implicación tuvo como resultado que nuestra propuesta resultó ser la mejor valorada de un total de ocho presentadas por consultoras internacionales, así que llegó el momento de trasladarme a Arica y Parinacota para implementar directamente en terreno todas las acciones que habíamos propuesto en el proyecto.

¿Te ha resultado fácil adaptarte a este país? ¿Cuáles son las diferencias culturales más grandes que has encontrado?

Lo cierto es que no resultó tan difícil como esperaba. Hablar el mismo idioma facilita mucho el camino, aunque en muchas ocasiones el uso diferente del idioma nos hacía entrar en malentendidos o interpretaciones dispares. Quizás ese fuese el aspecto más delicado en los comienzos. Los chilenos y nosotros somos muy similares culturalmente hablando, por lo que trabajar en la otra esquina del mundo no te hace sentir que estés tan lejos de tu ciudad. Los españoles tenemos una excelente reputación profesional en Chile, así que el camino para introducirse laboralmente es amable, sin querer decir con esto que sea fácil.

Resúmenos como ha sido tu desarrollo profesional en una empresa internacional con una amplia trayectoria

Conocí al Grupo Innovaris hace bastantes años en una de las ediciones de la feria Fitur en Madrid. Ese primer contacto con ellos me despertó mucha curiosidad porque comprobé que se trataba de una consultora que desarrollaba proyectos ajustados a las necesidades reales de los destinos y del sector público y privado. Algunos años más tarde contactaron conmigo para ofrecerme la oportunidad de formar parte de su equipo de consultores especializados coordinando proyectos de desarrollo de productos turísticos. Esa primera oportunidad continúo con el asesoramiento en otros proyectos nacionales e internacionales y con la jefatura de proyectos para Chile, la cual continúa en la actualidad.

En Chile, estás al frente del programa “Turismo Activo y Patrimonial en el Borde Costero de Arica y Parinacota”; ¿podrías hablarnos de los aspectos fundamentales de este proyecto y cuáles son tus funciones?

Este proyecto ha consistido en la realización de una consultoría experta para identificar oportunidades y brechas, y confeccionar la hoja de ruta, al objeto de desarrollar el Programa Estratégico Regional “Turismo Activo y Patrimonial en el Borde Costero de Arica y Parinacota”, que integraba el desarrollo del sector del turismo activo, así como las actividades deportivas y no deportivas asociadas, con los recursos naturales, culturales y el medio rural de Arica, potenciando el desarrollo local de la región. La hoja de ruta debía ser modelo para la toma de decisiones durante el desarrollo del programa. La metodología de elaboración de hojas de ruta fue realizada con altos niveles de participación y comunicación entre los actores relevantes de la  región buscando generar el compromiso suficiente para enfrentar los desafios.

Como Jefa de proyecto he sido la principal contraparte de CORFO presente en todas las interacciones conjuntas. Mis funciones estaban vinculadas a la responsabilidad del diseño y coordinación de las actividades. Ser la interlocutora del proceso de diagnóstico y la Hoja de Ruta, proporcionando orientación, coordinación y mecanismos de apoyo tales como vehículos de comunicación, interactuando frecuentemente con los participantes y manteniendo el proceso en movimiento. Además de ser la responsable de la entrega oportuna y bajo los estándares de calidad de los productos esperados.

Perteneces a una organización que trabaja desarrollando Proyectos de Innovación locales y a nivel internacional. Muchas empresas consideran que invertir en innovación no es necesario, ¿qué les dirías o qué consejos les darías?

Uno de los grandes problemas del tejido empresarial español, es precisamente la poca innovación. ha habido y hay muy poca inversión en I+D+i. Cuando se habla de innovación solemos pensar en ciencia o tecnología, pero la innovación para mí va mucho más allá. La innovación es conocimiento, y es experiencia, colaboración y riesgo. Las instituciones no han apostado en la innovación de procesos, quizás porque el riego no entra en sus planes de crecimiento. Si pensamos en el futuro y en la expansión, deberíamos aprender de los errores y empezar a dedicar recursos a innovar tanto en procesos, como en materias primas, tecnologías o en el talento y la formación de los profesionales. No se trata de invertir miles de recursos de golpe, sino de ir poco a poco adaptando los procesos hacia el cambio.

En el caso concreto de Canarias, con todo nuestro potencial turístico, ¿crees que se están planteando o desarrollando propuestas de innovación que generen valor en este sector?

Sinceramente creo que no se están desarrollando propuestas arriesgadas. Estamos  anclados en procesos tradicionales que hasta ahora han dado frutos lineales y éxito asegurado, aunque no excelentes. Nos cuesta arriesgar y apostar pensando que unas veces se gana y otras se aprende. El objetivo para cualquier empresa privada e institución pública debe ser crecer gracias a la innovación que se realice a través de medios tecnológicos, formativos, de procesos o de investigación. La formación es un valor latente, cuanto mejor sea el equipo de personas, la tecnología o los procesos mayor capacidad de penetración se tiene en el mercado. Y por supuesto, investigar.

Con todo esto no quiero decir que existan en Canarias empresas que están invirtiendo y apostando por la innovación constante, pero sigue existiendo una gran brecha entre aquellas que apuestan decididamente y otras que se conforman con obtener resultados simplemente óptimos y no conseguir la excelencia como objetivo empresarial.

¿Cómo valoras el mercado de trabajo en las islas?

Me gustaría lanzar un mensaje optimista. Creo que la gran oportunidad consiste en lanzarse al mercado laboral desarrollando proyectos propios e innovadores. Hay mil oportunidades de desarrollo de negocio en Canarias. Simplemente hay que tener claro qué es lo que te gusta y qué sabes hacer, qué carencias empresariales existen en el mercado canario, desarrollar un buen análisis de viabilidad y mucha pasión por lo que decidas hacer. El éxito estará asegurado.